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29 de agosto de 2013

Prosa loca (*)

El mismo amor, la misma pizza


La pizza no se hizo famosa por la combinación del tomate y el queso, sobre una masa de tipo pan blanco. Esa es la visión de la gilada. Que cree sólo en lo que vé en un golpe de vista, sin intentar mirar más profundo.

Cualquiera cree que se hace pizza con tres elementos. Y se ufana de hacer con sus manos, lo que la boca no reconocerá en esta pizza, a las que para siempre nos atraparon desde alguna ocasión intantil remota y virginal.

El voluntarioso pizzero la llama "pizza casera" y la come con la satisfacción de un pintor de paredes de cantina, que copia malamente el estilo de Quinquela Martín y cree que lo ha logrado.

La pizza fue cautivando, atrapando, seduciendo por el mundo entero las bocas analfabetas de este placer sofisticado, eclipsando su naturaleza compleja con la virtud aparente de lo fácilmente asequible, igual que el mago hace parecer simple lo imposible.

Sin embargo, los más sensibles a la belleza universal, descubren en la pizza no tanto los secretos de factura, sino los detalles que van apareciendo a la percepción obstinada, a pesar de que los ojos se nublan y el paladar se narcotiza en el goce. El verdadero amante del arte, escudriña la obra sin dejar de entregarse.

La base de la pizza, no es un pan blanco levado cualquiera. Es una masa muy aireada pero de trama imperceptible y densa, muy liviana pero húmeda, sobre una costra quebradiza y crujiente, y bajo el baño sigiloso de los humores transpirados y solidarios del jugo del tomate mezclado con el suero del queso, que se juntan por el calor del horno hasta darle esa mojadura que no deja a la masa estar seca, ni le permite convertirse en un masacote mojado con textura de ñoqui de papa.

La fina superficie de la masa soporta su función de aislante, aún bajo los humores de la cobertura, mateniendo firme la densidad airada y semimojada bajo su nivel, y garantizando que el suelo de la masa no pierda nunca su crujido seco y quebradizo, por aceitado.

Por fin, en la cobertura de la pizza, la mozzarella en cantidades desbordantes forma grumos espumosos teñidos de pecas doradas del gratinado. La mozzarella conserva dentro de su cuerpo el fuego del horno que la mantiene en movimiento y bulle como lava ardiente mientras la ondulación de los bullidos forma valles por donde circulan finos ríos de aceite de oliva coloreado de pintitas rojizas y verdes, del ají molido y el orégano.

En la circunferencia del borde de la pizza se arma un juego de texturas imprescindibles para la gloria de este manjar. La masa se engrosa para evitar que la mozzarella se derrame hacia afuera y el borde se vuelve crocante. La mozzarella se adelgaza sobre el borde como una ola que llega a la superficie de la playa y luego retrocede. La ola del mar termina en una puntilla blanca, la mozzarella en un fino festón negro.

Si además de hambriento, la comés una noche de frío y lluvia, en una pizzería del centro de Buenos Aires, de parado, al lado del amor de tu vida, después de haber ido al Lorraine a ver Ladrones de bicicletas, estás sacando una foto que dentro de cuarenta años te va a hacer caer unos lagrimones más densos que la mozzarella.


(*)Prosa loca es lo único que se me ocurrió cuando me agarran las ganas de hacer un escrito como este, que es una especie de divertimento. Este blog lo empecé con un post sobre Bergoglio, de título "Von Bergoglio" donde por primera vez hice esta travesura. Y como tuvo mucho éxito volví a hacerlo, pero poco. Me animé a escribir un cuento para Luis Delía que se llama "D'Elía, French y Berutti, un solo corazón" y que a él le gusto mucho, y a otros también. Este es el tercero. A mí me gusta. No sé si a alguien más le gustará. Me gustaría que sí. Contame qué te parece, si te parece.


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Pino Solanas, su política buitre y la resolución de Ballesteros

EN QUÉ CONSISTE LA POLÍTICA "BUITRE" DE SOLANAS 9/01/2010
Buitre, porque para conseguir el poder se alía estratégicamente con la derecha como un comensal, y la alienta al proceso de destruir al Gobierno creyendo poder así alzarse con el poder al fin de la destrucción, porque confía en que su discurso más verborrágico e incendiario que el de la misma derecha, va a poder eclipsarlo y finalmente va a poder liderar el último tramo de la destrucción y alzarse con el poder.
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RESUELVO: 1) SOBRESEER DEFINITIVAMENTE en la presente causa N° 14467(expte 7723/98) en la que no existen procesados (art. 434 inc. 2° del Código de Procedimientos en Materia Penal) 2) REMITIR copia de la presente resolución (mediante disco) y poner las actuaciones a disposición de las HONORABLES CAMARAS DE SENADORES Y DIPUTADOS DEL CONGRESO DE LA NACION para su consulta o extracción de copias de las piezas procesales que se indiquen a los efectos que estimen conducentes. TEXTO DEL FALLO Leer comentarios

Cuentos de vida

12/02/2008 EL HOMBRE DEL PODRIDO TORNILLO(cuento)
Voy caminando sin mucho apuro para abrir mi óptica. Desde lejos veo que alguien que no conozco está frente a la puerta. El hombre consulta el reloj en su muñeca. Cruza los brazos sobre el pecho. Levanta la cabeza hacia el cielo. Baja luego la cabeza y mira sus zapatos. Descruza los brazos y mete las manos en los bolsillos. Termina la secuencia espasmódica descansando su esqueleto sobre un auto estacionado, mirando la puerta cerrada de la óptica. Vuelve a mirar el reloj. Sigue...
22/02/2010 - UN ÁNGEL EN COLECTIVO (relato)
Yo estaba tan embarazada, que había pasado la fecha de parto y mi familia me cargaba con la siguiente pregunta ¿y cuándo vas a parir? Y yo me reía, esperando que la naturaleza se ocupara en cualquier momento de que llegara mi bebé.
Lady D también estaba embarazada de su primer hijo. El papá de mi hijo decía que nuestro bebé tenía mejor ajuar que el hijo del Príncipe Carlos. Eran épocas de todo importado, y yo, eufórica por mi maternidad, había comprado el mejor cochecito de Harrod's y las ropas y utensilios para bebé, de lo más hermosos que encontré. Leer completo...
06/03/2008 - LOS GLADIOLEROS (cuento)
En el baño empezó a gotear la ducha. Hace de esto cinco años. Llamé a uno de esos brujos de la humanidad que atesoran saberes aquilatados y añejados en paneles de roble, uno de esos que miramos las mujeres agachando la cabeza, reconociendo nuestra inferioridad por efecto de la prueba contundente.
El plomero, que aparece con su bonete inmenso sobre el cual tiene una estrella, trae consigo herramientas que como la varita mágica, sólo obedecen a su secreto conjuro. La casa es un poco vieja, me dijo al irse, la próxima vez no le va a poder cambiar el cuerito a la canilla, va a tener que cambiar los caños. La sentencia estaba echada.
Cinco años después, es decir, ahora, se volvió a romper el cuerito y volvió a gotear la ducha. Leer más...
9/10/2008 - LOS JUDÍOS Y LOS REYES MAGOS (cuento)
Era la mañana del 6 de enero de 1954. Verano. En ese año yo iría al colegio por primera vez. Era la hija mayor de un matrimonio de judíos polacos inmigrantes. Teníamos un local de comercio seguido de vivienda, como había entonces. En el local, estaba mi papá. En la cocina de la vivienda, estaba mi mamá haciéndome el desayuno. Mis dos hermanitos, de 3 y 4 años, estaban aún en las cunas. Yo desayuné, y como hacía todos los días, salí a la calle a jugar con mis amiguitas. Serían las 10 de la mañana. Salgo a la calle y lo primero que veo es que todas mis amiguitas están juntas, y tienen algún juguete en la mano. Me extrañó muchísimo.
La Susi, mi mejor amiguita, tenía una enorme muñeca de trapo que yo no conocía, y la abrazaba y la ponía en el suelo a caminar, y la muñeca blanduzca se bamboleaba sacudiendo las trenzas rubias de hilos de lana de tejer.Leer Más...
16/09/2008 - MI LIBRO DE LECTURA DEL 55 (cuento)
El 16 de septiembre de 1955 yo tenía siete años, y estaba en "primero superior" (hoy segundo grado) de la escuela primaria.
La Revolución Libertadora trajo un cambio a la Escuela. Desaparecieron los carteles que cubrían las paredes en su parte superior tocando el techo de mi aula. De letras inmensas, decían "Segundo Plan Quinquenal-Perón cumple-Evita dignifica". La palabra "quinquenal" me encandilaba con sus sonidos juguetones, y no entendía bien qué quería decir "dignifica".
La presencia de Perón y Evita se trocó por paredes ascépticas, vacías, que me impresionaron cuando volví a la Escuela, después de unos días de asueto. El retrato de San Martín lucía ahora solitario y único símbolo del aula, como frío testimonio en blanco y negro de una historia lejana, sin la companía de aquellos carteles de colores alegres, de fondo amarillo y letras rojas, que representaban cosas del presente. Leer más...
13/11/2008 - GUEFILTE FISH (cuento)
Como yo soy la intelectual de la familia, mi cuñada Rivke me tiene envidia. ¿Qué creías? Te voy a contar lo que pasó. Era Rosh Hashaná y mamá invitó a hacer fiesta en su casa. Yo no le dije que no, ¿qué, acaso quiero cocinar para diez personas? Si a ella le gusta, que lo haga ella. El día que no esté mamá, va a ser otra cosa. Ahí voy a tener que cocinar yo, porque no voy a esperar que mi cuñada aprenda a cocinar, ni voy a comer esas porquerías que hace que no tienen gusto a nada.
Bueno, te estaba diciendo. Resulta que me puse a leer la historia del guefilte fish, en un libro antiguo de cultura idish. Vos sabés que a mí me gustan los libros, no voy a dejar de leer libros sólo para que mi cuñada no se sienta mal. Entonces leí que el guefilte fish estaba formado por tres distintas clases de pescado por una razón. Yo siempre me pregunté cuál serìa la razón de que fuera necesario hacerlo de distintos pescados. Leer más...
24/12/2008 - UN CUENTO DE NAVIDAD (cuento)
A pesar de ser judía, celebré Navidad mientras duró el matrimonio con el padre de mi hijo, que murió en el año 1994. Era gallego, socialista y agnóstico, pero le encantaba la Navidad, una costumbre que su madre engalanaba con una enorme Empanada a la Gallega que quedó en la memoria de sus cinco hijos. La Empanada a la Gallega de Doña Encarnación, a quien no tuve el gusto de conocer porque llegué tarde a la vida de esa familia, se repetía cada Navidad, con el consiguiente comentario obligado, “nada que ver con la que hacía la vieja”.

Mi nene era muy chiquito, recién ese año se había dado cuenta del personaje de Papá Noel. Su papá se disfrazaba y hacía las delicias de todos los chicos. Le habíamos dicho que iba a venir Papá Noel, con una bolsa de regalos. Leer más...
04/05/2008 - BUNGE ME SALVÓ LA VIDA (relato)
Bunge me salvó la vida con el mismo extraño mecanismo con el que mi hermanito descubrió la palmeta. Primero cuento la historia de mi hermanito. Después retomo con Bunge.
Capítulo 1. El extraño caso de mi hermanito y la palmeta
Un día apareció Raid.
Un aviso novedoso decía por televisión: ¡con la palmeta NO! ¡Llegó Raid! y aparecía en un dibujo animado, una palmeta estrellando insectos en la pared enchastrada de moscas aplastadas, y luego una señorita disparando el Raid por el ambiente. Mi hermanito y yo estábamos mirando televisión, y ambos nos asombramos. Leer más...